‘Phablets’, una tendencia en auge que funde teléfono y tableta

A medio camino entre el teléfono inteligente y la tableta informática, los ‘phablets’ están sacudiendo el mundo de la telefonía móvil, satisfaciendo a los consumidores que no logran decidirse entre uno y otro.

Los fabricantes presentes en el gran congreso de telefonía móvil de Barcelona, en el noreste de España, lanzaron una amplia gama de ‘smartphones’ que apenas caben en una mano y de tabletas que han reducido considerablemente su tamaño.

Para difuminar aún más las diferencias entre los teléfonos inteligentes y las tabletas, una selección de estas últimas ya puede usarse como celulares, aunque resulte algo incómodo.

En el World Mobile Congress que se celebra del 25 y el 28 de febrero en Barcelona, el Ascend Mate del fabricante chino Huawei, tercer productor mundial de teléfonos inteligentes, se proclamó campeón en cuanto a tamaño con una pantalla de seis pulgadas, algo más de 15 centímetros.

Pisándole los talones en este concurso de pantallas de ‘smartphones’, su competidor, el fabricante chino ZTE, lanzó su modelo Grand Memo con 5,7 pulgadas.

Cerrando el “podio” se colocó el Optimus Pro, del gigante surcoreano LG, de 5,5 pulgadas.

“Es una tendencia al alza, especialmente en Asia, y muchos de estos dispositivos son los preferidos de las mujeres, que no tienen que preocuparse de meterlos en sus bolsillos, sino que los llevan en el bolso”, dice Ken Hong, director de comunicaciones de LG.

Más de 120 millones de tabletas se vendieron en todo el mundo en 2012, un 50% más que en el año anterior, y la compra de ‘smartphones’ ascenderá hasta mil millones de unidades en 2013, según la consultora internacional Deloitte.

Mientras, el tamaño de las tabletas se va encogiendo.

La Samsung Galaxy Note 8, que salió al mercado justo antes del congreso, redujo su pantalla hasta las ocho pulgadas para competir con el nuevo iPad mini de la estadounidense Apple.

Por su parte, la taiwanesa Asus consiguió fusionar ambos dispositivos en un solo producto.

Asus presentó el Padfone Infinity, un ‘smartphone’ de cinco pulgadas y con pantalla de alta definición que utiliza la rapidísima red inalámbrica de cuarta generación (4G) y que se puede acoplar a una tableta de 10,1 pulgadas.

Los teléfonos inteligentes de 2013 también tendrán que ser rápidos, dado que la red 4G, también conocida como Long Term Evolution o LTE, se expande en todo el mundo.

El fabricante chino Huawei desveló un nuevo móvil en la feria, el Ascend P2, que definió como el más rápido del mundo.

De extremos esquinados y más fino que un lápiz (8,4 milímetros), la compañía asegura que puede alcanzar una velocidad de 150 Mbps, suficiente para descargar una película en alta definición de dos horas en menos de cinco minutos.

El móvil, con una pantalla de alta definición de 4,7 pulgadas, se alimenta de un procesador quad-core de 1,5 GHz y puede utilizar redes LTE.

Huawei registró un 5,3% de cuota de mercado en el cuarto trimestre de 2012.

Una cifra aún lejana a los dos gigantes del mercado, Samsung y Apple, que acumulan entre ambos un 50% de las ventas mundiales: 29% para Samsung y 22,1% para Apple.

Si no se puede ser ni el más grande, ni el más pequeño, ni el más rápido, aun hay otra manera de llegar al corazón de los usuarios: el bolsillo.

El fabricante finlandés Nokia, antes líder indiscutible del sector, intenta ahora seducir a los compradores con precios más bajos.

Nokia lanzó dos teléfonos inteligentes con el sistema operativo Windows Phone -los Lumia 520 y 720- con un precio sin impuestos de 139 euros (189 dólares) y 249 euros respectivamente.

Lejos de los sofisticados ‘smartphones’, la empresa finlandesa también ofrece el Nokia 105, un móvil básico ideado principalmente para realizar llamadas, al sorprendente precio de 15 euros.