Las tabletas gráficas son una herramienta fundamental para artistas gráficos y diseñadores, que se sirven de estos dispositivos para digitalizar todas sus creaciones “offline”.

A medio camino entre un folio y un ordenador

Una tableta gráfica es un dispositivo de entrada de información utilizado por artistas y diseñadores gráficos que permite al usuario dibujar una imagen en un soporte externo y digitalizarlo en una pantalla de ordenador sin tener que utilizar el ratón o el teclado. La mayoría de tabletas gráficas consiste en una superficie plana y algún tipo de dispositivo de dibujo, normalmente un bolígrafo o un lápiz. Aunque la tableta gráfica es el hardware más adecuado para artistas y creadores que quieran tener la sensación natural de dibujo manual de un objeto para poder seguir editándolo posteriormente en la pantalla, las personas que no se dedican a las artes gráficas pueden servirse también de la utilidad de estos dispositivos. El trazo suave de una tableta gráfica puede ser agradable para dibujar, especialmente entre aquellos que encuentran el ratón demasiado frío y difícil de manejar, además de evitar lesiones por estrés repetitivo. Las dolencias del túnel carpiano son menos probables cuando se debe dibujar durante horas y se recurre a una tableta gráfica. A la hora de comprarlas, se pueden adquirir en variedad de tamaños, desde superficies de dibujo pequeñas de 7 x 10 centímetros hasta las más grandes, con dimensiones que rondan los 18 x 23 centímetros. Incluso es posible hacerse con grandes tabletas gráficas que pueden alcanzar los 36 centímetros de ancho, pensadas especialmente para diseñadores profesionales y arquitectos. El tamaño es el factor principal en la determinación del coste de una tableta gráfica, aunque hay otros factores que pueden influir en su precio. Un buen nivel de sensibilidad a la presión en la superficie de dibujo de la tableta gráfica es también determinante en lo que respecta a su calidad. La sensibilidad a la presión alta, de forma ideal al menos de 512 niveles, permite controlar varios aspectos de su dibujo, incluyendo el color y grosor de línea, simplemente presionando más o menos el lápiz, imitando el dibujo que se haría con un bolígrafo.

Empezar a dibujar

El lápiz óptico incluido con la tableta gráfica es también una consideración importante en la decisión de compra. Un lápiz óptico puede estar montado en la tableta y sujeto con una correa de sujeción libre. Muchas tabletas no requieren ya de batería. Un buen lápiz también tiene típicamente botones de función en el lateral, de modo que el usuario puede realizar acciones comunes, tales como cambiar una herramienta en el programa de dibujo para borrar, sin tener que usar el ratón o el teclado. Wacom es seguramente la marca más conocida de tabletas gráficas gracias a la buena reputación de sus productos. Dispone de una gran variedad de modelos diferentes que cubre las necesidades de usuarios desde aficionados a artistas profesionales. Es posible elegir entre multitud de tamaños y funciones adicionales para encontrar el dispositivo adecuado para las necesidades de cada comprador. En su rango de productos de acceso se incluyen productos de un coste que ronda los 100 euros. Si se busca una tableta semi-profesional, habrá que empezar a buscar herramientas a partir de los 500 euros, aunque existen otros fabricantes con variedad de productos, como Aiptek, que dispone de dispositivos con ratón inalámbrico en lugar del lápiz, KB Gear, dirigido al público adolescente, y CalComp, con productos pensados principalmente para arquitectos y diseñadores.

Imagen de Martin Lehotkay